La propuesta tiene doble escala, la formada por el conjunto de escala urbana que a su vez está constituido por piezas de pequeño tamaño permitiendo construir un espacio interior ajardinado de escala más doméstica.
El acceso a todas las viviendas se produce desde el jardín interior, que así se carga de sentido vecinal. La condición fragmentada de la propuesta permite cierta fluidez entre las áreas verdes más cercanas en el Paseo de la Cuba y el interior de la manzana en la que se sitúan las parcelas objeto de esta propuesta.
Debido a las dificultades para encajar, ordenadas y bien orientadas las 58 viviendas exigidas en el pliego de condiciones en las dos parcelas asignadas proponemos agregar ambas parcelas en una única y así tener menor coste en la construcción del sótano en el que se sitúa el garaje y los trasteros, ya que este es más compacto y sencillo y además se facilita la vialidad de la calle Zamora ya que el garaje solo tiene una entrada. La agregación de ambas parcelas no produce una edificación de escala inapropiada para el barrio, ni por la longitud de sus fachadas ni por la concentración del volumen a edificar, ya que este se fragmenta en cuatro piezas.