La geometría de la parcela permite una propuesta ordenada y sistemática. El reto del proyecto consiste en aprovechar esta ventaja que lo hace riguroso y económico, sin renunciar a cierta variedad espacial e intensidad. Pequeños movimientos y dislocaciones, tanto en planta como en sección, producen espacios ricos y de escalas muy diversas. Lo sistemático del proyecto alude a la economía, la razón social y el orden urbano, pero al tiempo, el proyecto construye un escenario mediterráneo vibrante y luminoso para la vida cotidiana, distinta y específica, de cada vecino.
La posición contrapeada de los cuatro bloques permite mejorar las vistas y el soleamiento de las viviendas, así todas están bien soleadas. Además, ayuda a configurar pequeños espacios, al norte y al sur de la parcela, de escala doméstica, unos sombreados y otros soleados. También permite ganar ligereza espacial y lumínica al alternar espacios cubiertos y abiertos con otros totalmente descubiertos.