Partiendo del planeamiento existente, la propuesta proyectada investiga la transformación de la manzana como forma urbana tradicional universal y su capacidad de adaptación a las condiciones particulares del lugar en la que se sitúa.
El edificio se proyecta como respuesta a su situación urbana. Así, en su situación de límite de la actuación del Plan Parcial del “Ensanche de Barajas” frente al entramado de la ciudad ya existente, emergen cuatro volúmenes independientes unidos entre sí por el local Terciario de Proximidad y por la marquesina situada en la linde este y que protege el acceso peatonal de la parcela.
El conjunto edificatorio tanto destinado a uso residencial como a terciario de proximidad alcanzan una altura que cumplen tanto con la servidumbre aérea de la zona como con el límite de la altura de cornisa.
El espacio interior de la manzana se proyecta como un área de relación y juego para los habitantes de las viviendas.