La vivienda se construye en la parte norte de la parcela, dejando, así, el jardín al sur. Al norte, un patio inglés resuelve el desnivel existente en la parcela e ilumina el sótano donde se encuentran los espacios de servicio y el garaje. En la planta baja, se encuentran, el estar, en doble altura, al sur, y la cocina y los dormitorios al norte, separados por un mueble compacto que aloja los armarios, y los baños. La planta superior repite la estructura de la inferior, separando los dormitorios del espacio en doble altura del estar.
El volumen de la casa es compacto y rotundo. En él los huecos, que se encuentran en sus cuatro fachadas, son sus señas de identidad. Cada hueco ha tomado una importancia y significación autónoma, distinguiéndose de otros por su posición, por su orientación y por su forma y tamaño. De modo que es más la ley que imponen los huecos que la distribución de los usos la que ordena el volumen abstracto de la casa. Unas pérgolas y pequeñas construcciones dan sentido y orden al jardín.