El nuevo puente peatonal Lent-Tabor no puede competir con el Stari Most, el puente histórico de la ciudad de Maribor, sino que debe subrayar su formidable presencia. La propuesta es una estructura que quiere complementar al antiguo puente.
La estructura del puente está calculada al límite para conseguir la máxima esbeltez. El puente está revestido de madera dotándolo de un carácter arcaico y contemporáneo al tiempo. Su fuerza iconográfica se consigue ocultando la estructura, el resultado es a la vez abstracto y expresivo. Su vocación es ser una pieza más de la estructura del Stari Most.
Visualmente es lo más transparente posible, sin intrincados ni ostentosos efectos. Es simple y natural: dos apoyos y la mayor esbeltez. Económicamente es racional; posee una simple y elegante estructura, calculada al límite y sin sofisticadas técnicas constructivas. Aporta una imagen memorable, singular y fácilmente identificable.