El Centro de Protección y Rescate debe expresar el valor y el dinamismo de los servicios que alberga. Esperamos del Servicio de Rescate e Intervención, junto con una gran dosis de optimismo positivo, al menos el grado de audacia y, al mismo tiempo, la seguridad que nos da la confianza en él. Hemos optado por una solución en la que el edificio expresa estos valores del equipo de rescate, con elementos arquitectónicos que no son anecdóticos, como suele percibirse.
El Centro de Protección y Rescate está claramente dividido en tres secciones, una sobre otra, cada una de las cuales responde a las necesidades del programa. Los tres elementos están configurados de forma diferente, de modo que el edificio puede verse como una estación de bomberos y rescate, como un edificio acogedor con oficinas donde se tratan los problemas cotidianos, y como un centro de entrenamiento deportivo.
El edificio es dinámico y ligero, parece volar. Se utilizan repeticiones sistemáticas que, con ligeras variaciones, indican el carácter cinemático de las máquinas y su economía a distancia. Su aspecto ingrávido es inconfundible, pero el edificio es a la vez robusto en su estructura de misión, y translúcido y optimista.